domingo, 8 de junio de 2008

Automap


Me hubiera venido muy bien un automap para la medina de Fes. Supongo que con un teléfono con GPS podría hacerse, aunque se complica en los puntos sin visibilidad a los satélites (hay muchas callecitas cubiertas). La precisión es otro temita...

martes, 3 de junio de 2008

Firenze

Nos tomamos el tren desde Roma Centrale una mañana de lluvia, y luego de 3 horas llegamos a Firenze. Luego de caminar un poco llegamos al hostel, en el 3er piso de un edificio. El ascensor era muy chiquito, a duras penas entramos los dos, pero la primera vez, para subir las valijas, tuvimos que turnarnos. En realidad vimos estos mini ascensores en varias partes de Italia.

La ciudad es hermosa: pequeña, con edificios no muy altos (no más de 4 pisos), muchas plazas, se respira el aire renacentista. La Catedral (Santa Maria del Fiore) en la plaza del Duomo, y la torre del Battisterio, son increíbles. Gigantescos, detallados, evidentemente restaurados para que resplandezcan como cuando los construyeron. Caminar por una calle que de al Duomo y luego salir a la plaza es creo que una de las experiencias más fuertes de Firenze. Por dentro la basílica no es tan impresionante.

La Piazzale Medici también es hermosa, con el palacio y su torre gigantesca (no puedo dejar de imaginar lo que significaba ver eso a mediados del 1400s), y la réplica del David en su emplazamiento original. Desde ahí, pasando por la calle del Uffizi entre estatuas de italianos ilustres (Giotto, Galileo), llegamos al río. Es una linda vista y se ve el Ponte Veccio, el único puente antiguo que quedó desde la segunda guerra mundial, cuando los nazis se dedicaron a dinamitar los otros para frenar la avanzada aliada. Sobre ese puente están los   
artesanos del oro (son como casitas).

El día siguiente fue de museos. Primero, una cola de una hora y media para la Galleria dell' Academia para ver al famoso David. Vale la pena, es una estatua bastante más grande de lo que uno se la imagina, muy detallada (el pelo, las venas en las manos). Como en otras ocasiones, está prohibido sacar fotos o filmar (ya me quejé de eso en otro post), pero igual alguna gente lo logra.

Luego almorzamos algo que ahora no recuerdo, probablemente sandwiches o pizza, y fuimos al Uffizi (Oficina). Los Medici y otros mecenas (Papa incluido) se dedicaban a atesorar obras y artefactos de la antigüedad- romanos sobre todo- y los artistas renacentistas se inspiraban en ellas. En este museo hay muchas pinturas de Leonardo Da Vinci, Rafel y Boticcelli, entre ellas una de las preferidas de Barbi, la Alegoría de la Primavera, de este último. Otra cosa impresionante son los bustos de emperadores romanos: estuvimos viendo el aspecto de gente que vivió hace más de 2200 años!

Para cerrar el día terminamos comiendo en un restaurant muy pintoresco en un callejón.

El último día fue aprovechado para pasear un poco más en la ciudad. Antes lavamos ropa en un lavadero automático en el que no había nadie para atender, sólo máquinas que funcionan con monedas (también una con billetes que te da cambio en monedas). Lamentablemente nos cruzamos con una pareja yanqui-taiwanesa. El tipo hablaba constantemente de plata: que esto sale tanto, que lo otro no es caro, que cuánto va a salir el secado de ropa, en fin.

Cruzamos el río y fuimos hasta el Palazzo Pitti, que entre otras cosas no muy divertidas tiene colecciones de trajes de operas y un museo de la historia de la vestimenta, así que no entramos. Pero muy cancheros nos tiramos en la explanada en frente del edificio para chatear y leer el mail. Luego seguimos caminando y subiendo hasta el parque Michelangelo, y todavía más arriba hasta una iglesia con murales gastados y un cementerio. Me pregunto por qué hicieron un cementerio tan en lo alto, hay que cargar el cajón en subida, y lo mismo para ir a dejar flores. Bajamos nuevamente al parque, comimos helado y miramos el atardecer. Nos volvimos a cruzar con la parejita, y lo PRIMERO que pregunta el tipo es cuánto pagamos el secado de ropa.

Rematamos el día en un restaurant medio pelo. Tan medio pelo que la comida era fea, la cerveza suponemos sin alcohol y mi plato con una mosca. Así que protestamos y nos fuimos sin pagar. Primera vez que me pasa esto de "mozo, hay una mosca en mi comida". Al día siguiente partimos a Venecia. 

random facts:
- como en otras ciudades, hay vendedores de artículos truchos que ni bien escuchan una sirena de policía levantan campamento en 1 segundo (o menos) y se van
- hay muchos libros de arquitectura y diseño en las librerías

random pics:

un minibus, literal


banda


perros de paseo


casi todas las persianas eran así


estatua


Garrett


tano


caliente


Este pintor callejero amagó varias veces con tirar el pote de pintura. Dijo que lo estuvo usando por 10 años y que eran demasiados recuerdos.


de dónde son la mayoría de los inmigrantes


motos eléctricas!


café y café con leche


cura


despedida de soltera en la Piazza Michelangelo


ropa de papel